Ayer, día 6 de julio, se firmó en el Palacio de Santa Cruz de Madrid, el convenio de constitución de la Casa Árabe en Madrid, y el Instituto Internacional de Estudios Árabes y del Mundo Musulmán, en Córdoba.
Presidieron el acto Miguel Ángel Moratinos, Ministro de Asuntos Exteriores y de Cooperación; Amr Musa, Secretario General de la Liga Árabe; Manuel Chaves, Presidente de la Junta de Andalucía; Alberto Ruiz Gallardón, Alcalde de Madrid; Rosa Aguilar, Alcaldesa de Córdoba; Santiago Fisas, Consejero de Cultura de la Comunidad de Madrid, y Leire Pajín, Secretaria de Estado de Cooperación Internacional.
También fueron invitados a asistir al acto de firma del convenio numerosos representantes del cuerpo diplomático y de las organizaciones internacionales, así como arabistas y representantes de organizaciones no gubernamentales, como Cherif Abderrahman Jah, Presidente de la FUNCI.
La Casa Árabe, que ocupará las Escuelas Aguirre de Madrid, de estilo neomudéjar, será financiada en un 60 por ciento por el Ministerio de Asuntos Exteriores y Cooperación, contando también con financiación de los Ayuntamientos de Madrid y Córdoba, y las Comunidades de Andalucía y Madrid.
Moratinos comentó que hacía diez años, cuando se creó la Casa de América, él había imaginado la Casa Árabe, como una plataforma para el intercambio cultural, la cooperación y el diálogo. También hizo una calurosa mención a la solidaridad «con nuestros hermanos palestinos, por quienes no podemos dejar de sentirnos desgarrados en estos trágicos momentos». A continuación señaló que en el futuro se crearía la Casa de Sefarad, con el fin de fomentar el necesario entendimiento entre árabes e israelíes, «mediante el debate e incluso la disensión, pero desde la palabra».
Amr Musa, por su parte, alabó la iniciativa del Jefe de la Diplomacia española, y expresó el «respeto y profunda admiración» que la puesta en marcha de la Casa Árabe le merecía. Tuvo además palabras en favor de la Alianza de Civilizaciones, que, según expuso, le parecía «una grandiosa e inteligente inciativa del Presidente Rodríguez Zapatero».
Tanto Rosa Aguilar como Alberto Ruiz Gallardón se refirieron a la idoneidad de Córdoba y Madrid como sedes para esta institución, por sus raíces históricas de origen árabe, y el talante abierto de ambas ciudades.
Fisas se refirió a la necesidad de propiciar un conocimiento mutuo y de profundizar en las acciones en favor de la igualdad de género, mientras que Pajín se congratuló por las posibilidades de establecer programas de cooperación con el mundo árabe y musulmán que Casa Árabe brindará en el futuro.