«Quería saber lo máximo acerca de aquel que hoy tiene una indiscutible influencia en los corazones de millones de seres humanos. Me convencí más que nunca de que no había sido la espada la que conquistó el modo de vida en el Islam de aquella época. Era la sobria sencillez, la humildad del Profeta, el escrupuloso cumplimiento de su palabra, su intensa devoción hacia sus compañeros y sus seguidores, su intrepidez, su valentía, su absoluta confianza en Dios y en su propia misión.
Esto, y no la espada, puso todo a su alcance y superó todo obstáculo. Cuando cerré el segundo volumen (de la biografía del Profeta), me apenó que no tuviera más para leer acerca de esta gran vida».
Mahatma Gandhi